El entierro de la sardina de Manzanares homenajea a ‘Manolillo’ y a ‘Registra’

El miércoles de carnaval en Manzanares volvió a estar protagonizado por ‘la sardina’. Por la mañana hubo sardinada popular en la plaza de la Constitución. Y por la tarde, tras la comitiva fúnebre que recorrió las calles, se realizó su incineración y se repartieron 2.500 pastas con su silueta. Y en el recuerdo, ‘Manolillo’ y Pepe ‘Registra’ volvieron a ser homenajeados.

Aunque físicamente ya no están con nosotros, ‘Manolillo el pintor’ y Pepe ‘Registra’ han estado muy presentes en el carnaval 2024 de Manzanares. Ellos fueron durante muchos años protagonistas de esta fiesta callejera y este año también lo han sido gracias al homenaje que sus familiares y amigos les han hecho cada día viviendo intensamente las carnestolendas.

Dos de los hijos de Manuel Fernández, junto a uno de sus nietos, fueron en la parte inicial de la comitiva fúnebre que comenzó a las cinco de la tarde en la plaza del Gran Teatro y que recorrió las calles Virgen de la Paz, Jesús del Perdón y Cárcel hasta llegar a los Paseos Príncipe de Asturias, donde culminó para ellos este carnaval tan especial. Y es que ‘Manolillo’, caprichos del destino, nos dejó el día del entierro de la sardina del año pasado.

El coche con los restos de la sardina, monaguillos, enterradores, clero y todo tipo de personajes habituales participaron en este cortejo fúnebre en el que no faltaron las plañideras. Y aquí, la peña ‘El Patacón’ del recordado José Fernández-Pacheco, Pepe ‘Registra’, con su viuda e hijas, tributó su particular homenaje vistiendo la indumentaria que solía llevar este día: de viejecita o de señorona.

Lo más emotivo fue cuando, ante el recinto de ‘La Pérgola, los llantos simulados se convirtieron en lágrimas reales. Algunos recuerdos de ‘Registra’ se incineraron junto a la sardina mientras se coreó el nombre de Pepe ante los centenares de personas congregados alrededor de la pira. El recuerdo a los ausentes ha sido constante y han hecho que este carnaval haya sido muy especial para sus familias.

Como emotiva fue la hermandad y complicidad que hubo entre todas las personas que, con su implicación, hacen posible que perdure la máscara callejera, la que con su transformación nos regala sonrisas y buenos momentos.

Y después de despedir a la sardina, y prácticamente el carnaval, el público pasó al recinto de ‘La Pérgola’ para endulzar las penas. Aquí, operarios municipales repartieron 2.500 pastas con la silueta de la difunta sardina.

108 kilos de sardinas

No fue el único tentempié de la jornada. Por la mañana, en lo que ya se ha convertido en una tradición que cada año va a más y reúne a mayor número de personas, los carnavaleros realizaron una sardinada popular con el reparto de 108 kilos de sardina malagueña, asadas a la plancha. Hubo a quienes les estuvieron tan buenas que, a pesar de las largas colas, repitieron.

Y es que, además de deliciosas, las sardinas son beneficiosas para la salud ya que son bajas en calorías, son ricas en minerales, en vitaminas A, B y D y previenen problemas estomacales, en los huesos, depresión y asma. Además de “almorzados” y “curados”, los asistentes se fueron cargados de omega 3 para tener un corazón más saludable. Nada mejor en un día que, también fue San Valentín.