60 niños del Campus Urbano y Kanguras han ‘tomado’ la Casa Consistorial de Argamasilla de Calatrava

El edificio consistorial de Argamasilla de Calatrava ha tenido una entrañable eclosión infantil con la visita que han cursado sesenta niños y niñas, de varias edades y niveles, que han estado acompañados por el alcalde y la concejala de Educación.

Una actividad más que, en puertas ya de la clausura de propuestas del Ayuntamiento para la conciliación en verano como el Campus Urbano y el programa Kanguras, les ha permitido conocer varios departamentos municipales y saludar a parte de la plantilla.

Jesús Ruiz ha ejercido de guía, primero para ver el departamento donde se atiende al público para, después, visitar los despachos de Secretaría y Alcaldía, finalizando en el salón plenario, donde ambos ediles les han obsequiado con bolsas de chucherías.

“En este día de verano han querido visitar desde el Campus la que es la casa de todos y la verdad que eso es una satisfacción tremenda, porque verlos tan pequeños y con esa ilusión con que han venido”, refería el primer edil, valorando también la labor de monitores.

Ruiz Valle y menores han empatizado durante la visita y “ha sido encantador verlos pasar a los despachos, ver las fotos e intentar comprender lo que aquí se hace y lo importante que es la institución más cercana como es el Ayuntamiento”.

Ana Belén Sáez, por su parte, ha destacado el normal desarrollo del campus, por cuanto no ha habido incidencia alguna y ha destacado la alegría y gran satisfacción por participar que han demostrado tanto menores como el equipo de monitores de la firma Atlas.

“Ha habido desde deportes, hasta juegos y concursos y gracias a los profesionales de esa empresa en la que hemos vuelto a depositar nuestra confianza, han realizado todo tipo de actividades”, sumando la edil de Educación otras más.

Muchas relacionadas con el agua refrescante en un verano especialmente caluroso, por lo que no han faltado “fiesta de la espuma, del agua, con globos, además de algún tobogán acuático” y otras propuestas muy del gusto infantil como es el rocódromo.

“Nuestro balance es por tanto muy positivo, porque los niños están entretenidos mientras sus padres están tranquilamente trabajando sabiendo que sus pequeños están en buenas manos y además disfrutando”, apostillaba la munícipe.

También lo han hecho imbuyéndose en diferentes épocas de la Historia, porque “cada semana se ha enfocado a sucesivos momentos y episodios históricos, de manera que también ha sido una manera de enseñarles de forma divertida partes de este temario”.