Cáritas Interparroquial de La Solana se ha unido a las instituciones apoyadas por el Legado Bustillo, a fin de que puedan seguir impulsando sus actividades. La presidenta de la fundación benéfica, Luisa Márquez, y la directora local de Cáritas, Agustina Martínez, han escenificado la firma del acuerdo.
“Cáritas se define como la acción socio-caritativa de la Iglesia y nos ocupamos de atender a los pobres que acuden a nosotros”. “La palabra pobreza no solo en el sentido de necesidad material, sino también de otras pobrezas que han ido surgiendo, como alcoholismo, drogadicción y otros problemas sociales también son objeto de nuestra atención”, ha declarado Martínez. La base fundamental de Cáritas es el voluntariado, aunque también cuentan con personal técnico, en concreto una trabajadora social, que contribuye en el trabajo administrativo y burocrático necesario para sacar adelante todo, siempre en estrecha colaboración con las parroquias y con Cáritas Diocesana de Ciudad Real.
La directora destaca esa primera labor es la acogida, donde se detectan las necesidades de la persona y permite conocerla de manera integral mediante una escucha activa. “Nuestro caballo de caballa es la acogida y este año hemos atendido a unas doscientas personas, la mayoría inmigrantes”, ha destacado.
Entre las actividades cotidianas de Cáritas-La Solana se encuentran varios talleres en los que se aprende y trabaja a la vez, con becas de ayuda incluidas. Hay un taller de reciclaje textil, otro crecimiento personal y uno más de castellano para extranjeros.
Luisa Márquez ha querido subrayar la gran labor que realiza Cáritas, tanto en La Solana como en todo el mundo. Ha recordado la trilogía ‘parroquia, barrio, pueblo’. “Me llama mucho la atención el trabajo del voluntariado y lo importante que es vuestra labor en esa primera de contacto con los más desfavorecidos. Hacéis una labor encomiable”.
