domingo. 08.09.2024

Su instructor se llama Carlos Ruiz, 8vo dan de este arte marcial, que nos explica que el ninja “no es la figura asesina que se ve en algunos filmes donde se le ha echado mucha fantasía, en el manga, animé o películas ochenteras, sino que fue un personaje histórico existente en Japón”. Este grupo de entrenamiento ciudadrealeño pertenece a la escuela Nagare Dojo (donde Dojo sería el lugar o academia donde se practica la vía y Nagare significa fluir). En su centro practican las nueve escuelas de artes marciales de Japón, algunas ninjas otras samuráis, y sus antiquísimas tradiciones, del siglo XII, XIV ó XVI.

En ocasiones, Nagare Dojo se traslada de las cuatro paredes de su academia al exterior de la ciudad, a algún parque, para practicar sin peligro alguno el arte marcial, “en estos momentos estamos practicando con un bastón denominado bo que mide 1,80 metros de largo, lo hacemos aquí en el parque para tener más libertad de movimientos y evitar golpear a los compañeros”. El grupo de entrenamiento ciudadrealeño lo componen personas de todas las edades y género ya que, según explica su instructor, “es un arte marcial no competitivo, de paz, y muy tradicional, donde se respeta la filosofía de las artes marciales antiguas y el contexto histórico en el que se producen”.

El objetivo último de Nagare Dojo es ayudar a fortalecer la disciplina y el autocontrol de cada alumno, “en definitiva, hacer mejores personas, personas de paz”, afirma Ruiz. 

Ninjas en Ciudad Real