El Ayuntamiento de Ciudad Real solicitará nuevas ayudas dentro del Plan de Transformación, Recuperación y Resiliencia del Gobierno de España para poner en marcha tres importantes actuaciones de la concejalía de Movilidad. Se trata de la peatonalización y mejora de la accesibilidad de la calle Paloma y de la calle Ruiz Morote, el itinerario peatonal y accesible desde la calle Calatrava hasta llegar a la zona de la Universidad y la planificación de un aparcamiento disuasorio en la zona de la estación del AVE, proyectado como un “espacio intermodal, que estará situado pasado el puente a la derecha, cerca de las obras de la nave de señalización”, según explicaba la concejala de Movilidad, Raquel Torralbo. Añadía que “lo consideramos un entorno ideal por la cercanía a la estación de tren”. Desde el Ayuntamiento seguiremos apostando por esa línea de trabajo que fomenta “las áreas peatonales, la superficie de espacios libres porque queremos una ciudad pensada para el peatón, reduciendo la utilización del vehículo privado, especialmente en el interior de la ronda, ya que supone mayor seguridad para las personas, crea transversalidad en la trama urbana, favorece la economía y el turismo; además reduce el ruido provocado por el tráfico y mejora la calidad del aire”. Para la concejala de movilidad hay que “promover una movilidad activa, poder pasear y con ello mejorar la calidad de vida”.
Respecto a la actuación en la calle Ruiz Morote aseguraba Torralbo que “será parecida o similar a la que hemos realizado en la calle Toledo y calle Calatrava, para que la ciudadanía pueda disfrutar de toda la zona comercial y administrativa. Se trata de una superficie de unos 5.000 metros cuadrados”. En cuanto a la calle Calatrava, que afectará a unos 11.000 metros cuadrados, “se va a mejorar la zona para el peatón, aunque sabemos que no se puede hacer como una plataforma única, porque tiene que haber espacio para el vehículo, pero se trata de crear un eje peatonal que unirá la Plaza Mayor con la Universidad, para integrarla dentro de la ciudad mejorando la comunicación”.
En cuanto al aparcamiento disuasorio, que estará ubicado “detrás del AVE contará con unos 5.000 metros cuadrados y unas 250 plazas. Habrá algunas dedicadas a las personas con movilidad reducida y puntos de recarga para potenciar el uso de vehículos eléctricos”. Explicaba la concejala de Movilidad que “será un aparcamiento con una tarifa reducida, ya que la propia convocatoria del ministerio obliga a que los espacios puedan rotar”. En total, se pedirán subvenciones por un valor estimado de 4.060.000 euros, de los que el 90 por ciento (sin IVA) lo asumirá el propio ministerio, por lo que “no podemos dejar escapar esta oportunidad para la ciudad y para que la ciudadanía lo pueda disfrutar”.