Carlos Marín, presidente de la Federación Empresarial de Ciudad Real (FECIR), hizo balance del año y abordó temas de actualidad en el tradicional desayuno navideño con los medios de comunicación.
En primer lugar, quiso agradecer a los socios de FECIR su reelección, señalando que “había sido un año muy emocionante donde he recibido de nuevo el apoyo de los empresarios”. Para este nuevo mandato quiso recordar que la idea “es seguir pensando en una estructura provincial, donde el 92% de las empresas son pymes y micropymes y el 8% lo forma la gente que empieza y hay que cuidar”.
Habló de los buenos datos reflejados en el comercio y la hostelería de la provincia, siendo incluso mejores que antes de la pandemia de la Covid-19. Pero advirtió que, con la subida de los precios en los combustibles y en las energías, sumado a la ruptura que existe a nivel nacional entre la patronal y el Gobierno, “el mes de enero comenzará no como una cuesta, sino como una cumbre”. A lo que se suma la posible finalización de los 20 céntimos de ayuda en el combustible que ofrece el Gobierno, confiando en que “al menos se mantengan para los transportistas y otros profesionales del sector”.
En cuanto a la subida del Salario Mínimo Interprofesional, Marín ha recordado que, “más allá de la subida salarial entre 40 y 80 euros, es el incremento que le supondrá a los empresarios en la cotización a la Seguridad Social, un 38% más”. Indicando que, según un estudio realizado por el Cepyme, “esta subida puede suponer perder puestos de trabajo”. poniendo de manifiesto igualmente que “la ministra no quiere dialogar”, por lo que, Marín, pedía que se realizaran acuerdos a tres bandas como se hacen en Castilla-La Mancha para poder trasladar la negociación salarial a los convenios y poder aplicar las subidas en función de la necesidad de cada sector.
También habló sobre la futura sede de FECIR indicando que “aunque el proyecto sigue vivo, está bastante más lejos de lo que estaba antes”, tras parar el intento del Ministerio de Trabajo de vender el edificio empresarial situado en la ronda de La Mata. Se trata de un edificio que desde que surgió FECIR se propuso como posible sede. Necesita inversión, y de hecho hay comprometidos 1,8 millones de euros para esas obras, compromiso que adquirió la antigua ministra de Trabajo, Magdalena Valerio.
