Ante la ola de calor que afecta estos días a todo el país, UGT Castilla-La Mancha ha reclamado hoy a las empresas un “plus de responsabilidad” en la protección de la salud de los trabajadores y trabajadoras. Además del cumplimiento estricto de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y del Real Decreto 486/1997 y su reciente modificación añadida a través del Real Decreto-ley 4/2023, que establece la necesidad de tomar medidas frente a los fenómenos meteorológicos adversos, el sindicato ha pedido ir más allá en materia de prevención y endurecer la normativa ante las olas de calor. En este sentido, se sumaba a la petición que ha hecho la Confederación Europea de Sindicatos para que se fije una temperatura máxima de trabajo al aire libre a partir de la cual habría que suspender la actividad.
Así lo han puesto hoy de manifiesto el secretario de Organización y Salud Laboral de UGT CLM, Javier Flores, y la coordinadora regional de Prevención de Riesgos Laborales de UGT CLM, Irene Ortega, durante la rueda de prensa que han ofrecido para presentar la Guía de Prevención Laboral frente a las Altas Temperaturas elaborada por el sindicato para dar respuesta a muchas dudas y preguntas que tienen los delegados/as, trabajadores/as y también empresarios/as sobre cómo actuar ante los riesgos que representa el calor. En ella se recogen los efectos que tiene sobre la salud la exposición a altas temperaturas; cómo organizar el trabajo para salvaguardar la seguridad y salud de la población trabajadora; recomendaciones y derechos de las personas trabajadoras; y cuáles son las obligaciones de la empresa, entre otros muchos aspectos. “Queremos que sirva también de guía para incluir en los convenios colectivos medidas y protocolos de protección”.
Para ambos tanto el Real Decreto-ley 4/2023 de 11 de mayo como los recientes acuerdos firmados entre UGT FICA, CCOO y la patronal sobre protocolos concretos de actuación frente a episodios de temperaturas extremas en los sectores de Construcción y Agricultura representan un avance para la protección de los trabajadores/as. Sin embargo, entienden que hay que dar un paso más y “establecer medidas más estrictas y vinculantes”, como la que proponen desde la Confederación Europea de Sindicatos para que se fije una temperatura máxima en el trabajo. “Solo seis países en toda Europa han adoptado una ley en este sentido, entre ellos, Hungría, Bélgica, Letonia, Eslovenia, Montenegro y España. En España está estipulado que la temperatura máxima debe ser de 27 grados en interiores pero sobre exteriores la normativa no estipula nada”.
El sindicato ponía el ejemplo de otros países en los que las normas son más claras: “en China los trabajos se suspenden si la temperatura exterior alcanza los 40º. Además, si hay más de 37º los empleados no pueden trabajar al aire libre durante más de seis horas ni realizar el trabajo durante las tres horas más calurosas del día. Vemos que en otras partes del mundo -también en Australia, Qatar o Estados Unidos- existen normas precisas que -debido a los efectos del cambio climático- también deberíamos adoptar aquí”.
El secretario de Organización y Salud Laboral de UG CLM añadía que cuando se superan los 30º el riesgo de accidentes laborales aumenta un 7%, un 15% cuando se alcanzan los 38º.
Javier Flores -quien recordaba que el sindicato dispone de un Servicio de Prevención de Riesgos Laborales para ayudar a trabajadores/as y a empresas- insistía en la necesidad de que la Inspección de Trabajo esté vigilante a las situaciones que puedan producirse en las empresas. Reclamaba igualmente poner en marcha una figura de prevención de riesgos laborales que llegue a aquellas empresas con menos de seis trabajadores/as, que son aquellas que no están obligadas a tener representación sindical y que son, precisamente, las que más accidentes sufren.
El primer semestre de 2023 termina con un descenso de los accidentes laborales en Castilla-La Mancha
El responsable de Salud Laboral de UGT en la región también ha valorado los datos de siniestralidad conocidos ayer relativos al primer semestre de 2023, unos datos que hablan de un descenso de los accidentes laborales entre enero y junio de 2023. En concreto, en este periodo se han producido en nuestra comunidad 13.750 accidentes, un 13,3% menos que en el mismo periodo de 2022.
Por provincias -y según apuntaba Javier Flores- la siniestralidad ha bajado sobre todo en Toledo, un 19%, y de manera también muy importante en Albacete (-15%) y en Ciudad Real (-15%). Igualmente bajó en Guadalajara, un 8%, aunque aumentó un 11% en la provincia de Cuenca. “En el primer semestre de 2023 se han producido 18 fallecimientos en accidente laboral, son 7 menos que en el mismo periodo de 2022”.
Por último destacaba el descenso del índice de incidencia de siniestralidad (el porcentaje de accidentes por cada 100.000 trabajadores/as). Si bien Guadalajara y Cuenca siguen siendo las provincias españolas que encabezan este índice, Castilla-La Mancha ya no lidera esta clasificación. Ya está por detrás de Navarra (319), Baleares (314) y La Rioja (298) y se acerca poco a poco de la media nacional (223).