Vicente Sabariegos Sánchez nació en la localidad de Piedrabuena el 19 de mayo de 1810. Fue un guerrillero y general carlista con una gran influencia durante décadas en la provincia.
Su participación en las Guerras Carlistas se inició en 1833, cuando junto a su suegro Manuel Adame de la Pedrada “el Locho” se dirigieron a Portugal donde se unieron a Don Carlos María Isidro de Borbón / pretendiente carlista al trono bajo el nombre de Carlos V).
Al año siguiente, en junio de 1834, aparece como Teniente Coronel de las tropas carlistas, y embarcó junto con Don Carlos hacia Inglaterra. Posteriormente regresó a España y, formando parte del denominado Escuadrón de la Legitimidad combatió en el Norte de la Península contra el ejercito realista que defendía la causa de la reina Isabel II.
Dentro del contexto de la Primera Guerra Carlista se incorporó a las partidas de su comarca natal, y estuvo al frente del Escuadrón de Tiradores de la Mancha con el que formó parte sucesivamente de los ejércitos del Norte, de la Mancha, y de Aragón y Valencia.
Cuando se produjo el Convenio de Vergara (31 de agosto de 1839) entre el general isabelino Espartero y trece representantes del general carlista Maroto y que dio fin a la primera guerra carlista, Vicente Sabariegos no aceptó el acuerdo y se retiró a Francia con las tropas del General Ramón Cabrera. Tras una breve estancia en Bourges, donde residía Don Carlos VI (Carlos Luis de Borbón y Braganza), Sabariegos se estableció en Portugal, desde en 1848, en el contexto de la Segunda Guerra Carlista penetró en España. Bajo el mando del Brigadier Don Mariano Peco estableció la guerra en la provincia de Ciudad Real, pero al resultar herido en un encuentro con el ejército realista tuvo que regresar pronto al país vecino. Allí residió hasta 1858, en que volvió a España.
Nombrado Comandante General de Ciudad Real, se sublevó en las proximidades de la capital de la provincia en la noche del 23 al 24 de julio, reuniendo inicialmente en torno a un centenar de hombres, con los que sorprendió al pequeño destacamento de la Guardia Civil de Picón, al que hizo prisionero, pero poco más tarde era derrotado en las proximidades de Piedrabuena. Aunque el General carlista Juan de Dios Polo había sido vencido y preso a mediados de agosto, Sabariego trató aún de mantenerse en campaña, pero se vio obligado a refugiarse en Portugal a principios de septiembre.
No tuvo más suerte en su intento de establecer la guerra en Extremadura en abril de 1872, coincidiendo con el gran alzamiento carlista que dio comienzo a la Tercera Guerra. Nombrado Comandante General de Galicia a principios de 1873 se trasladó a esta región española aunque fue derrotado nada más comenzar la campaña en la Sierra de San Mamed, por lo que optó por situarse cerca de la frontera portuguesa. A principios de mayo lanzó a una nuevo ataque ocupando Ginzo de Limia (Orense) al frente de sesenta hombres pero siendo batido nuevamente el 12 de mayo en el Puerto de Barrozos volvió a refugiarse en Portugal.
En septiembre de 1873 Don Carlos VII (Carlos de Borbón y Austria-Este) confirió el mando de las provincias de Ciudad Real, Toledo, Badajoz y Cáceres, y en menos de un mes consiguió reunir cuatrocientos diez jinetes y cuarenta infantes, con los que mantuvo varias victorias contra el ejerció realista, consiguiendo entrar en Urda (Toledo), Fernáncaballero (Ciudad Real), Herrera del Duque (Badajoz) y Guadalupe (Cáceres). El 6 de noviembre derrotó en Retamosa (Cáceres) a una columna de ciento cincuenta guardias civiles, pero falleció en el combate, el seis de noviembre de 1873, siendo enterrado en la vecina localidad de Deleitosa (Cáceres).
FUENTES:
MARTÍNEZ DE VELASCO, Eusebio (1873): “El jefe carlista don Vicente Sabariegos”. La Ilustración Española y Americana:
DE PAULA OLLER, Francisco (1890): “Álbum de personajes carlistas con sus biografías”. Tomo III, Barcelona, La Propaganda Catalana.
