Tras saludar a los miembros de la Corporación municipal de Puertollano frente al Consistorio, Felipe VI ha conocido que Rosa, una mujer de avanzada edad, se ha indispuesto, probablemente afectada por el calor, y no ha dudado en improvisar y, con el bastón de mando municipal en la mano, entrar en las dependencias del Patronato Municipal de Deportes, donde estaba siendo atendida por Protección Civil y efectivos del Sescam.
En el interior de las dependencias municipales, el monarca, acompañado del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, la ministra de Política Territorial y Portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez; y el alcalde de Puertollano, Adolfo Muñiz, ha expresado a la mujer sus deseos de que esté bien, al tiempo que le deseado una pronta recuperación.
"Una amiga suya nos ha dicho cómo está y ha pedido si podía verla", ha dicho el Jefe del Estado al entrar, entre muestras de cariño. "Creo que está bien atendida, mucho ánimo", se ha despedido, tras preguntar a los profesionales de Protección Civil por lo que ha pasado.
De su lado, el presidente García-Page ha animado a la mujer: "Anda que no te queda nada; no te preocupes que vas a aguantar mucho y estás rodeada de mucha gente que te cuida". La mujer se ha recuperado entre las muestras de atención de Protección Civil, Sescam, funcionarios municipales y el propio personal de seguridad de la Casa Real.