Al acto de inauguración y a la bendición del belén han asistido la alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, acompañada de la primera teniente de alcaldía, Pilar Zamora, la portavoz del equipo de gobierno, Mariana Boadella, una amplia representación de la Corporación Municipal, de la propia asociación, el pregonero de la Navidad 2023, Alberto García Reyes, la cartelista, Nuria Barrera, y del tejido social, cultural y político de la ciudad.
La alcaldesa de Ciudad Real ha calificado el belén de este año como “un hito, un reto, el mayor en cuanto a esfuerzos, inversión y desvelo, porque si ya el año pasado la Asociación de Belenistas hizo un trabajo desde la excelencia, este año ha apostado por un diorama, y no sabíamos cómo iban los ciudadanos a acoger la propuesta, pero la creación ha superado todas las expectativas”. Agradecía Eva María Masías el trabajo de todos los servicios municipales, que se han implicado en el proyecto con ganas y tiempo. Un año más, ha dicho la primera edil, “este belén municipal nos hará referente en la cultura, en la tradición, en esa identidad que nos aporta un belén y que sin duda será visitado, en estos casi cuarenta días, por numerosos visitantes que igualarán seguramente el récord que tuvimos el año pasado con el belén monumental”.
Explicaba el presidente de la Asociación de Belenistas de Ciudad Real, Antonio Vich, que “la inauguración del belén es un momento muy emocionante, después de muchas de horas de trabajo, de desvelo, de mucho estudio y análisis para que Ciudad Real se sienta orgullosa de su belén monumental un año más”. Se trata del “belén más difícil, técnica y artísticamente, que hemos hecho desde la Asociación”. Agradecía el presidente la colaboración inestimable de la alcaldesa de Ciudad Real, del Ayuntamiento y de todos los servicios municipales “no por colaborar, sino por hacer suyo el montaje con una entusiasta colaboración”.
Agradecía también el trabajo de Javier Ramírez de Arellano por calcular una estructura que permite tener “el diorama monumental, no permanente, más grande de los que se va a exponer en España esta Navidad, con 10 metros de luz, sin pilares intermedios, lo cual es una obra de ingeniería”. También ha querido destacar la ayuda de José Ángel García y de José Manuel Melero, maestro belenista y miembros de la Asociación de Belenistas de Sevilla, para la “difícil” elaboración del mar de Galilea y el inestimable trabajo de Nuria Barrera por reflejar en su cartel el belén. Asimismo, ha tenido un reconocimiento especial para todos los miembros de la Asociación de Belenistas que “se han entregado en cuerpo y el alma en un año de trabajo y cinco semanas muy intensas de montaje, desde el 24 de octubre hasta que lo culminamos el 27 de noviembre”.
Terminaba diciendo Antonio Vich “que en una sociedad donde los valores cristianos no son defendidos, los Belenistas volveremos a demostrar el valor de la tradición centenaria, que probablemente el año que viene será declarada patrimonio inmaterial de la humanidad por la UNESCO, y que nos refleja el nacimiento del Señor con su mensaje de paz y esperanza”.
Entre los elementos más destacables cabe destacar algunas figuras hechas específicamente para este belén, sin molde, por lo que serán únicas, en concreto las de la cena de Herodes con los Reyes Magos, explicaba Jesús Torres. Es un modelo de belén diferente “con técnicas que se usan en la parte de Andalucía occidental e importadas de Cataluña, que muestran el hilo conductor del mar, que se ve desde todos los puntos del belén, con técnicas muy teatrales”.
Posteriormente, la comitiva se ha dirigido al belén del tronco de la suerte, instalado en el Museo López-Villaseñor, y elaborado por los miembros de ADACE CLM (Asociación de Daño Cerebral Sobrevenido de Castilla-La Mancha). Asociación a la que irá destinada la recaudación voluntaria del público que se acerque a ver los belenes. Entre las novedades del tronco de la suerte cabe destacar el uso del agua y una mayor amplitud de espacio.