El Festival de Cine Español Emergente (FECICAM) ha celebrado este domingo una nueva sesión de proyecciones con las secciones Fecicam Off y Series. Con ello se ha dado inicio a un evento que ha reunido a directores, actores y amantes del cine que apoyan el talento emergente.
Previo a las proyecciones, los directores de Se acabó, Historias de Toilette y Vigilia han compartido sus perspectivas sobre las obras que presentaban, destacando la pasión y el esfuerzo que hay detrás de cada proyecto.
Fran Caballero, director del cortometraje Se acabó, ha compartido su entusiasmo por el éxito continuo de su obra, un cortometraje realizado por más de 30 jóvenes de Marchena. “Es muy bonito ver que está dando sus frutos. Es la primera vez que nos lanzamos a hacer este tipo de proyectos y participar en festivales, y está siendo muy bien acogido”, ha comentado Caballero.
Se acabó ha sido seleccionado en varios festivales de renombre, incluyendo el Festival Cinema Jove de Valencia, el Festival de Cine Infancia y Adolescencia de Bogotá, y la Mostra Mirades de Torrent. El cortometraje ha cruzado recientemente el Atlántico, siendo finalista en la edición número 15 del festival colombiano, lo que subraya su creciente proyección internacional.
Por su parte, Juan Martínez, director del cortometraje Vigilia, ha explicado la premisa de su obra, la cual aborda el inquietante descenso a la locura de un padre. “Vigilia es la historia de un padre que, en medio de la noche, es desvelado por su hija pequeña, quien tiene miedo y no puede dormir. Lo que empieza como una situación tierna y tranquila pronto se convierte en un juego de angustia y desesperación, marcado por el sonido de un interruptor”ha explicado Martínez.
Asimismo, ha dicho que Vigilia “no es una historia de fantasmas o seres extraordinarios, sino una representación cruda de las enfermedades y trastornos psicológicos que afectan cada vez más a nuestra sociedad”. En el aspecto técnico, el cortometraje ha sido rodado en una única habitación, utilizando una progresión de planos que, a medida que avanza la historia, se vuelven más inestables, añadiendo una tensión escalonada al relato.
Por su parte, Antonio Savinelli, co-director de la serie Historias de Toilette, ha hablado sobre su proyecto, una serie web multiplataforma de seis capítulos, cada uno de unos diez minutos de duración, que aborda historias que tienen lugar en baños públicos. “Cada episodio explora diferentes estilos y géneros, mostrando las variadas situaciones que pueden ocurrir en estos espacios tan cotidianos”, ha comentado.
El proyecto, hecho en Valencia y dirigido también por Simón Fariza yJosé Juan Rodríguez, ya ha pasado por varios festivales y ha tenido una gran acogida en YouTube, donde uno de los capítulos ha alcanzado medio millón de visualizaciones. Savinelli ha añadido que, dado el éxito de la primera temporada, el equipo ya ha considerado la posibilidad de producir una segunda, con historias situadas en otros tipos de baños.
Además de estas proyecciones, la Sección Fecicam Off también ha presentado AIma de Vanessa Rodríguez, una obra que ha explorado los dilemas humanos en un mundo tecnológico. Una obra que ha explorado los dilemas humanos en un mundo tecnológico. La directora ha expresado su gratitud: “Que mi corto se proyecte en un festival de mi ciudad es un reconocimiento muy especial. Este proyecto no hubiera sido posible sin el apoyo de La Casa del Cine de Ciudad Real, que me brindó las herramientas y el espacio para llevar mi visión a la pantalla. Además, trabajar con mis compañeros ha sido una experiencia enriquecedora”.
Dentro de esta sección también forman parte Chiquita Piconera de Mey Montero, Daisy de Aditi Dixit, Shecid Domínguez y Pepot Atienza y Entre Miradas de Emiliano Reyes.
En la Sección de Series, junto con Historias de Toilette, también se han proyectado Coia o Caos de Carlos Godoy y Una Perra Andaluza de Pablo Tocino.
‘La otra isla’
Este sábado, también se ha proyectado el cortometraje La otra isla de Evelyn Mulet, una obra producida durante la pandemia que ha capturado el sentimiento de aferrarse a la tierra natal. Mulet ha explicado que su cortometraje habla de "ese sentimiento de pertenencia y de amor por tu terruño", y ha expresado que espera que “sea disfrutable en el festival y que el público de la ciudad venga y lo disfrute”. La otra Isla ha sido rodada en un cayo en la Bahía de Seis Fuegos, Cuba, un lugar sin electricidad y con pocos habitantes, donde la comunidad ha decidido quedarse por el profundo amor que sienten por su tierra. El mayor reto para producir el cortometraje, según Mulet, ha sido precisamente las condiciones en las que se ha llevado a cabo, en un entorno natural aislado.
