Al alto y cada vez mayor coste energético para miles de autónomos, que está suponiendo el cierre de sus negocios, ya que se une a otros factores que está dañando a los autónomos de la provincia durante años, hay que unir el cada vez menor servicio cercano y profesional de diferentes compañías eléctricas, con poca respuesta ante esta importante subida que sufre este colectivo, junto con el resto de la sociedad.
Las facturas, añade la Asociación Intersectorial de Autónomos (AIA), son cada vez más complejas y difíciles de interpretar, y ante este incremento de los precios, además de “cargar estas grandes cuantías”, no existe una explicación lógica, así como poca o nula respuesta cuando se requiere información al respecto, cuando se trata de un autónomo.
Los autónomos tienen que soportar un elevado impuesto energético que se unen a nuevas tasas, lo que supone que no pueda estimar el gasto mensual ante tipo de situaciones.
Por todo ello, AIA solicita que todos los actores en esta ecuación, cada vez más complicada para este colectivo, sumen sus fuerzas para hacer frente a las demandas de los autónomos, que son la mayoría del sector empresarial de esta provincia.