María Luisa Cabañero, una de las primeras mujeres bombero del país, con varios récords de natación, y Carmen Quintanilla, presidenta nacional de Afammer, han recibido esta mañana el I Reconocimiento Provincial a la Igualdad 'Pastora Marcela' que la Diputación, en concreto el área de Igualdad, ha organizado con motivo del 8M, Día Internacional de la Mujer, en un acto celebrado en uno de los patios del Palacio Provincial, abarrotado de autoridades, amigos y familiares.
En la entrega de los galardones, ambas han abogado por el impulso a una educación en igualdad, con valores, cuando algunos jóvenes hoy en día, lamentablemente, pecan de machismo, más que sus padres y abuelos. Mientras Cabañero ha considerado que las niñas y adolescentes del siglo XXI deben fijarse en modelos adecuados para conseguir sus logros, "siempre me acompaña el lema de 'si quieres, puedes', por lo que hay que ser valientes e ir subiendo peldaños poco a poco, porque el éxito no se mide por los triunfos, sino por los obstáculos que superas". Ha resaltado la importancia de valores como la constancia, el esfuerzo, la tenacidad, el coraje, la humildad y el respeto a los demás, aprendidos en la práctica deportiva y aplicados en su trabajo como bombera. Ha compartido una anécdota en el desarrollo de su profesión: "mi primer fuego fue en Abenójar, en una cocina, y alguien me dijo que no fuera porque me iba a quemar; desoí tal comentario, hice mi trabajo y desde entonces me gané su respeto".
Por su parte, la líder de Afammer ha defendido un feminismo sin ideologías y ha abogado por incorporar a los hombres en el discurso de la igualdad y contra la violencia. Ha agradecido especialmente este premio a todas las mujeres rurales de España, a sus dos hijos y a la Diputación Provincial, "nunca pensé que se me iba a premiar en Ciudad Real, por lo que me hacéis sentir un poco profeta en mi tierra", dirigiéndose al presidente de la Diputación, Miguel Ángel Valverde, en nombre de toda la Corporación.
Precisamente, Valverde ha dado la enhorabuena a las galardonadas, dirigiéndose en primer lugar a Quintanilla, a la que ha definido como mujer pionera en la defensa de la mujer rural, "con su vehemencia ha puesto en el centro de la política nacional al colectivo de mujeres rurales de España"; de María Luisa Cabañero ha destacado la ruptura de cánones sociales establecidos, "has abierto las puertas a otras muchas mujeres y a comprender que la mujer está más que capacitada para el desarrollo de cualquier profesión". En definitiva, ha añadido, dos mujeres excepcionales que han abierto un camino y han roto barreras en pro de la igualdad, "en ellas identifico el espíritu del personaje quijotesco de Pastora Marcela, donde el esfuerzo cuenta y el talento importa".
