Tajante y pesimista ha sido el presidente de la Federación Empresarial de Ciudad Real (FECIR CEOE-Cepyme), Carlos Marín, en la valoración de los datos de paro del mes de noviembre, que han experimentado una subida de 933 personas en Castilla-La Mancha, 569 de Ciudad Real. A su juicio, estas cifras suponen "la crónica de una desaceleración anunciada", argumentado que, a nivel nacional, son los peores datos de afiliación de un mes de noviembre desde 2019 y el peor en cuanto a paro desde hace 3 años; y en Castilla-La Mancha ha aumentado a pesar del tirón de la agricultura, en plena campaña de recogida de aceituna, aunque el paro global es el mejor desde 2017".
Marín ha insistido en el apoyo por parte de la Administración hacia empresarios y autónomos como generadores de empleo y riqueza, realizando una bajada de impuestos y dando incentivos para frenar dicha ralentización, "y no se nos está haciendo caso, por lo que continuará la desaceleración que ya estamos viendo en las cifras".
Carlos Marín ha indicado que con estas premisas, en la que no se confía en los empresarios para generar empleo, se legisla de parte y se "dopan" los datos del paro con más de un millón de personas como fijos discontinuos pero que actualmente muchos están en el paro, como el sector del turismo, etiquetándoles como demandantes de empleo, "estamos haciendo trampas en el solitario y la economía se está parando, se aprecia en las menores exportaciones, la bajada de ventas en el mercado nacional y la desconfianza a la hora de invertir", ha ultimado.