En el balance de su primer año como alcaldesa de Ciudad Real, Eva María Masías, se ha referido a la reciente noticia de la futura adquisición, por parte del Ayuntamiento, de 50.000 metros cuadrados del polígono Oretania, gestionado por Sepes, para que esta entidad pública pueda acometer cuanto antes la primera fase de urbanización. Esta compra ha sido posible, ha aclarado Masías, gracias a una modificación de remanente de más de un millón de euros con el compromiso de cuatro millones, que es el pago por el suelo a adquirir.
Cabe recordar que el requisito de Sepes era la adquisición de la mitad del 10% de suelo para poder emprender la urbanización del parque empresarial ciudadrealeño, cosa que finalmente llevará a cabo el Consistorio capitalino. Oretania cuenta con una superficie de un millón de metros cuadrados.
El suelo adquirido, ha explicado la regidora, se pondrá a disposición de las empresas interesadas, "no sabemos aún a qué precio, tenemos que ver el interés general y la repercusión económica de cada entidad empresarial".
Ha recordado que el polígono ha estado abandonado desde 2002 hasta 2019 "año en el que llegó este equipo de Gobierno que ha estado intentando reactivarlo, no sin complicaciones pero al menos obtuvimos el compromiso de Sepes". Para Masías, es una muy buena actuación, "sabemos de la necesidad de tener suelo industrial en la ciudad, por lo que el Ayuntamiento va a adquirir suelo industrial con la certeza de saber que es una estrategia muy buena económica y socialmente para la ciudad".
ZONA DE BAJAS EMISIONES
A preguntas de Ayer&hoy, la primera edil de Ciudad Real ha pedido tranquilidad ante la posible inquietud generada por la implementación de la Zona de Bajas Emisiones en la capital con la instalación de cámaras de vigilancia y una plataforma de control para el acceso a la zona centro para 2023. A este respecto, Masías ha recordado que se trata de un proyecto a cumplir a instancias de una directiva europea que no es de ahora sino de hace tiempo, previsto para 2023 aunque hasta 2030 no será efectivo, "ya se ha estado trabajando en gobiernos locales anteriores y se trata de todas las ciudades de más de 50.000 habitantes". Ha explicado por otra parte que se irán dando los pasos necesarios para cumplir los compromisos, "lo que no hay que hacer es impacientarse con el ruido de fuera, que siempre es mayor; se va a hacer como en todas las ciudades, quedan años para seguir avanzando". Ha ultimado que, como todo cambio, supone una controversia, como ocurrió con las peatonalizaciones, "pero con el tiempo se revertirá esa inquietud en la mejora de una ciudad más confortable".