El delegado de Desarrollo Sostenible en la provincia de Ciudad Real, Casto Sánchez Gijón, ha asistido junto al subdelegado del Gobierno en Ciudad Real, David Broceño, a la liberación a campo abierto de un nuevo ejemplar de lince ibérico en el Parque Nacional de Cabañeros que hasta ahora permanecía en un cercado de pre suelta coincidiendo con el 29 aniversario de la declaración de Cabañeros como Parque Nacional.
Se trata de una hembra joven llamada Uvita cuya finalidad es que pueda emparejarse con un macho que permanece en este espacio natural desde el pasado mes de abril y, con ello, convertir Cabañeros en un corredor para conectar las poblaciones de linces existentes tanto en los Montes de Toledo como en Sierra Morena.
Sobre esta cuestión se ha pronunciado Sánchez Gijón, al resaltar “el éxito de reintroducción de esta especie en peligro de extinción, y donde la provincia de Ciudad Real se ha confirmado como un territorio clave después de que hayamos liberado 55 ejemplares desde 2014 procedentes de centros de cría en cautividad”.
En este sentido, el delegado provincial de Desarrollo Sostenible ha detallado que 55 de esas liberaciones se han producido en Sierra Morena Oriental, mientras que la otra ha sido precisamente la hembra introducida en el Parque Nacional de Cabañeros.
Además, Casto Sánchez se ha referido al esfuerzo realizado por el Gobierno de Castilla-La Mancha para asegurar la pervivencia de los linces invirtiendo casi 1,1 millones de euros en Europea financiados en parte por la Unión Europea y que han ido destinados a la señalización en carreteras de la presencia de estos animales así como asegurarles la alimentación y seguimiento de los mismos.
En sus declaraciones, David Broceño ha destacado que “hoy es un gran día para la biodiversidad de nuestra región y un paso más hacia la consolidación del lince ibérico como símbolo de la riqueza natural de España. La liberación de Uvita no sólo refuerza la población de esta especie en Cabañeros, sino que también nos recuerda que, con trabajo conjunto, podemos revertir los daños del pasado y construir un futuro mejor para nuestra fauna”.
El Parque Nacional de Cabañeros se incorporó este año
El pasado mes de febrero el Gobierno de Castilla-La Mancha realizó la primera suelta de un lince ibérico en el Parque Nacional de Cabañeros para su reintroducción en el medio natural al que se suma la hembra liberada esta mañana dentro del programa que desarrolla el Ejecutivo regional, “y que está permitiendo a Castilla-La Mancha consolidar la recuperación de una especie que está catalogada en peligro de extinción con la presencia estable de ejemplares en varias áreas de nuestro territorio”.
715 ejemplares en Castilla-La Mancha
El delegado de Desarrollo Sostenible ha recordado que con 715 ejemplares, “Castilla-La Mancha aglutina ya el 35 por ciento del total de estos felinos en peligro de extinción que habitan en la Península Ibérica” que significan “una cifra récord desde que nuestra región participa en los programas de reintroducción del lince Ibérico y las previsiones indican que vamos a seguir haciendo que crezca".
Por todo ello, Casto Sánchez ha agradecido la colaboración de los diferentes actores del territorio como propietarios de fincas particulares, colectivos de cazadores, cotos de caza y grupos conservacionistas, que están posibilitando junto al Ejecutivo de García-Page “el exitoso regreso del lince en nuestra comunidad autónoma”.
Programa de reintroducción
El Gobierno de Castilla-La Mancha lleva 10 años desarrollando el programa de reintroducción del Lince Ibérico en el medio natural, y que está permitiendo a Castilla-La Mancha consolidar la recuperación de una especie que está catalogada en peligro de extinción con la presencia estable de ejemplares en varias áreas del territorio regional.
Este proyecto pionero en la región, está enmarcado dentro del proyecto europeo ‘Life Lynx Connect’ del que la Comunidad Autónoma forma parte, junto a 21 socios, y que se desarrolla en Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura y Murcia, además de en Portugal.
La población del lince ibérico desapareció abruptamente entre los años 80 y la década de los 2000. En el caso de Castilla-La Mancha, la especie se dio por perdida a finales del siglo XX. Todo cambió en 2014, con la primera suelta de linces que se realizó en la localidad ciudadrealeña de Almuradiel. En pleno verano, fueron liberados los linces Kiowa, Kaplan, y Kairós.
Los esfuerzos realizados desde entonces, han permitido que se alcancen números de “récord” en la región, en la que hay más de 700 animales.