La investigación de la operación Badlawyer comenzó a mediados de noviembre después de que el Equipo@ de esta Comandancia de la Guardia Civil, tuviese conocimiento de un posible delito de estafa por abuso de confianza en la que se consigue estafar 13.715 euros a una persona especialmente vulnerable con discapacidad psíquica.
Uno de los autores por medio de una conocida red social, logra captar a esta persona que tenía diversos problemas económicos, y tras ganarse su confianza haciéndose pasar por abogado, logra que la víctima le realice numerosos ingresos de dinero a lo largo de un año y medio.
Por parte de los agentes, especializados en este tipo de delitos, se llevaron a cabo las gestiones necesarias para el posible esclarecimiento de este hecho delictivo, y tras su minucioso análisis se logró rastrear la “huella digital” pudiendo finalmente identificar a los autores que formaban parte de este grupo criminal.
Para llevar a cabo este tipo de hecho delictivo, que se encuentra experimentando un auge en las redes sociales, cada uno de los distintos componentes del grupo tiene un rol específico. Una de las personas del grupo es la responsable inicialmente de la captación por medio de las redes sociales de la posible víctima, especialmente vulnerable y con necesidades económicas, con la que una vez localizada proceden a mantener una constante comunicación tanto en la propia red social, como por medio mensajería instantánea, logrando ganarse la confianza. Una vez ganada, solicitan diversos ingresos periódicos para la realización de las gestiones solicitadas y tras alcanzar la máxima cuantía económica, los autores desaparecen tanto de la red social como de las demás mensajerías.
Esta operación culminó con la detención de una persona en Santander (Cantabria) y la investigación de otras dos más. Las diligencias y detenido fueron puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº1 de Villanueva de los Infantes.
Recomendaciones sobre ciberseguridad
- Desconfíe de cualquier perfil en una Red Social en los que les ofrezcan ayuda o servicios sin acreditar que se trata de una empresa, entidad pública o privada debidamente acreditada, no revele demasiada información personal en estas redes sociales.
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- Verifique la autenticidad de la cuenta de los perfiles desconocidos que soliciten amistad.
- Nunca revele su ubicación, a menos que sea estrictamente necesario.
Sea consciente de los riesgos de enviar dinero por cualquier vía o aportar datos bancarios, de tarjetas de crédito/debito, de contraseñas, de ubicación o de su propia localización y de sus familiares, a una persona que tras un perfil desconocido le solicite estos datos
