Cuando Kai ya camine solo, pasee por la plaza Mayor y compre chuches, verá frente a la tienda de golosinas de siempre una placa conmemorativa en recuerdo de alguien importante para Ciudad Real. Una persona que amaba a su ciudad por encima de todo y que, independientemente de ideologías políticas, de formas de ser, de colores o banderas, caía bien a todo el mundo. Un hombre que impulsó los festejos y las tradiciones populares de la ciudad, que instauró nuevas iniciativas que hoy siguen realizándose, como el carrusel de cada navidad que seguro probará Kai; un poeta que cautivó a muchos lectores de La Tribuna ansiosos de ver las coplillas de cada día y, por encima de todo, un gran amigo de sus amigos, que eran legión.
Ramón Barreda Fontes (1949-2022) ha recibido este viernes un cálido y simpático homenaje por parte del Ayuntamiento de Ciudad Real, con la asistencia de su familia, entre ella su esposa e hija, ambas de nombre Celia; y su hermano y ex presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda. Asimismo, han acudido autoridades de todo signo político, como el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares; el vicepresidente segundo regional, José María Caballero; la viceconsejera de Cultura, Carmen Teresa Olmedo; la delegada de la Junta, Blanca Fernández; responsables de la Diputación Provincial; miembros de la Corporación Municipal de Ciudad Real como el primer teniente de alcalde, Ricardo Chamorro; la edil de Festejos, Fátima de la Flor; la concejal de Servicios Sociales, Aurora Galisteo..., así como las exalcaldesas Pilar Zamora y Eva María Masías, entre muchos otros.
El acto se ha desarrollado en primer lugar en la sala de exposiciones de la Casa Consistorial, que ha quedado totalmente abarrotada. En declaraciones previas, el alcalde de la ciudad, Francisco Cañizares, ha destacado la figura de Ramón Barreda, “la dimensión que cogió Ciudad real a través de sus Fiestas, de sus tradiciones, a través de la cabeza de Ramón Barreda, es lo que conforma ahora mismo nuestra realidad. Ramón fue capaz, mediante sus responsabilidades en el Ayuntamiento, de hacer realidad iniciativas que hoy forman parte de las fiestas ciudadrealeñas”. Y ha añadido, “de una forma además muy humilde, porque ha sido el origen de muchas de las tradiciones y eventos que se producen en la ciudad. Además de implantarlas”. Por su parte, el primer teniente de alcalde, Ricardo Chamorro, ha comentado que “Ramón era una persona genuina y genial. Estamos orgullosos de recordar a Ramón, en el día de hoy”, y ha adelantado que “este equipo de gobierno va a recordar no solo a Ramón, sino a toda la gente emblemática de esta ciudad y que podamos hacerles estos pequeños homenajes que son positivos para fomentar la identidad y esencia de nuestra capital
Ricardo Chamorro Prado: "era un hombre libre, sin sectarismos, cercano y de gran capacidad creativa"
El homenaje ha estado abierto por Fátima de la Flor, concejal de Festejos, quien ha recordado la figura de Ramón Barreda, especialmente “su Pandorga, que tanto de lleno se dedicó a ella, su legado permanece vivo”. A continuación, ha intervenido Ricardo Chamorro Prado, ensalzando la imagen del homenajeado, “Ramón representa Ciudad Real. Su vida estaba unida a la ciudad”, y ha recordado de él, “su libertad, su ausencia de sectarismos, cercano, y con una gran capacidad creativa”.
Su hija, Celia Barreda, visiblemente emocionada en compañía de su madre, ha recordado que su padre “era un ciudadrealeño que amaba su ciudad”. Haciendo especial referencia a dos contribuciones, el carrusel de la Plaza Mayor y la cabalgata de Reyes”. A este respecto, ha recordado cómo su padre trajo camellos y caballos en dicho desfile e incluso quiso que desfilara un elefante, lo que ha provocado la sonrisa y el aplauso de todos los asistentes.
Por su parte, su hermano y ex presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha apuntado que el gran legado de su hermano fue su manera de ser, y ha agradecido al Ayuntamiento el homenaje.
La placa se ha ubicado en una de las columnas de la Plaza Mayor, frente a la antigua Taberna de Paco Carrión, testigo de Fiestas y Tradiciones que tanto ayudó a mantener vivas, y viene a reconocer su meritoria labor y dedicación a nuestra ciudad. El acto ha concluido con la música de una rondalla y las consabidas fotografías de familiares, amigos y autoridades bajo el 'cuadro' conmemorativo que reza así: "En la plaza Mayor, testigo de fiestas y tradiciones, quien tanto ayudó a mantenerlas vivas, Ramón Barreda Fontes (1949-2022)" y la coplilla: "Solo les digo una cosa/si hubiera un ranking sagrado/más de una Virgen famosa/se sentiría celosa/de nuestra Reina del Prado".
Kai podrá decir a sus amigos con enorme orgullo que ese nombre grabado en la placa de homenaje bajo los soportales de la plaza Mayor de Ciudad Real, que tanto transitó, era el de su abuelo.